top of page
Buscar

¡AMOR de CARNAVAL!, capitulo 12 - #YSBLF

  • Foto del escritor: Fan YSBLF !
    Fan YSBLF !
  • 9 mar 2018
  • 8 Min. de lectura

Ya eran las once de la noche y Betty seguía sin conciliar el sueño, daba vueltas en la cama, ya había aceptado el juego, pero ahora Armando quería algo serio con ella y eso le causaba más temor, porque tendría que poner toda su confianza en él y aunque ciertamente ha cambiado, esto es otro nivel donde necesita tener claridad estar segura de querer compartir toda una vida junto a su amado, necesita hablar con Paty de esto así que decide llamarla pero no contesta, insistió tres veces más no hubo respuesta, así que como segunda opción llamó a Román quien al tercer llamado contesto.


Rom. Hola Betty, paso algo?

Be. Hola Romi, necesito hablar con alguien, tengo una situación que me está atormentando – dijo sollozando –

Rom. Dónde estás? Si quieres paso por ti…

Be. En serio? Por mí no hay problema si no puedes hablamos por aquí, no te preocupes…

Rom. No, nada de eso, dime dónde estás, no te escuchas bien, además acabo del salir de un Bar con Claudia, ya iba para la casa.

Be. Dale, recógeme en mi apartamento, ya me cambio, en cuanto llegas?

Rom. Dame quince minutos, te parece?

Be. Listo te espero… - Betty comenzó a cambiarse a prisa, se puso la ropa más cómoda que encontró, se hizo un cola de caballo, se colocó los lentes y salió.


Armando estaba en la cocina tomando leche tibia le costaba dormir, razón por la cual se le había preparado, sabía que le había pedido a Betty pensar, darle su espacio, su tiempo, pero le costaba jamás había dependido tanto de una persona y mucho menos sus sentimientos, justo cuando iba salir de la cocina vio como Betty salía de su cuarto, mientras esperaba el ascensor hizo una llamada.


Be. Listo Romi ya bajo… no Armando no sabe que voy a salir, es mejor así.

Armando sintió doler su pecho, no podía creer que le había sido tan fácil elegir a ese hombre que a él estaba seguro que él jamás la amaría de esa manera, él la adoraba con todo su ser. Armando espero que Betty y saliera y busco una sudadera y bajo, al salir se dio cuenta que la esperaba Román duraron un tiempo parqueados frente al hotel tiempo suficiente para que Armando sacara su auto a la espera de que ellos arrancaran y seguirlos, el tiempo jugaba a su favor justo cuando se abrió la puerta del garaje los vio pasar, los seguía de lejos sin perderles la vista, Armando estaba celoso, furioso, colérico, como era posible que Betty, su Betty le hiciera esto.


Mientras tanto en el carro de Román, Betty le contaba todo su drama con Armando, razón porque la que decidió estacionarse para hablar bien, se parquearon cerca al parque donde Armando y Betty habían estado hace un par de horas.


Rom. Betty no puedo creer todo esto que me dices, parece sacado de una película, yo sí las miradas que se echaban en la fiesta, me causo gracia pero jamás pensé que estuvieras casada con él, si pides mi opinión como hombre sobre ese día te puedo decir que vi un hombre muy bravo, más bien celoso… por todo lo que pasaba, pensé que se gustaban y que habían tenido una discusión o algo así, pero con el pasar del tiempo me he dado cuenta que se aman mucho, sé perfecto que Armando me detesta por alguna loca razón, pero en sus ojos se ve que te ama Beatriz, en serio…

Be. Ay Román, es que me da tanto miedo, tu eres de lo que dices que hombre mujeriego no cambia, que solo se demora en embarrarla, no sé si pueda tener una relación en paz con Armando, además mira la cantidad de modelos que lo asedian, yo no puedo competir con ninguna de ellas.

Rom. Betty sé que soy partidario de la poligamia jajaja pero mírame con Claudia desde que llego ha sido suficiente, no he tenido necesidad de salir con nadie, te hablo desde mi experiencia, y ella… ha cambiado mi vida Betty, yo adoro a esa mujer, incluso hemos pensando vivir juntos, pero aún no damos el paso, por eso… por los mismo temores que siente tú, pero no por eso dejamos de vivir el amor que sentimos, no sería justo, no crees?

Be. Pero créeme que mi caso es bastante particular, además no sé cómo lo tomarán sus papás las pocas veces que los nombra me suena a muy complicado, y además ellos prácticamente criaron a su ex Marcela, no sé cómo vayan a recibirme.

Rom. No te des mala vida por algo que todavía no ha pasado, vive las cosas según vayan tomando su curso… tú y tu mala costumbre de preocuparte por cosas del futuro… vive el ahora, jamás serás feliz si sigues así. Te parece si te invito unos tragos?

Be. Ay Romi – lo abrazó – gracias de verdad, que haría sin ti ah?

Rom. Lo mismo que yo sin ti, nada… jajaja – le dio un beso en la frente – a donde vamos, al de siempre?

Be. Noooo!.... Ni creas mírame estas fachas, no señor, llévame al apartamento

Rom. Ay Betty! bueno entonces vayamos a mi apto y seguimos hablando te parece?

Be. Jajajaja está bien… bueno al menos sé que mañana mi jefe no podrá decirme nada por la desvelada.. jajajaja


Armando veía la escena desde su auto, vio los besos y los abrazos, la risas, la complicidad, todo… Armando lloraba, le había dado a elegir a Betty y estaba había decidido seguir con su vida sin él, era lo más justo, pero no por eso dejaba de doler, se sentía abatido, vencido, no podía creer que la mujer de su vida se iba de su lado, nuevamente la había arruinado en grande y esta vez no hay solución. El carro de Román arranco y Armando por inercia decidió seguirlos quería ver donde acababa su noche, donde por fin daría final a su amor por Betty.


Román ayudo a bajar a Betty del carro y le hizo una reverencia en broma, ella le contesto de la misma manera, iban inmersos en sus burlas, no se fijaron del deportivo azul que los seguía de cerca y que acababa de parquear a unos cuantos metros de donde ellos, Betty y Román entraron abrazados a su edificio, Román decidió dejar el carro parqueado a fuera pues sabía que debía llevar de regreso a Betty y era menos tedioso.


Rom. Como te parece? Mi Betty casada.. Jam!!! Y no me invito, se las voy a cobrar Beatriz!

Be. Ay Romi no digas eso, sabes perfecto que jamás harías falta en ese evento de no ser porque ni si quiera yo estuve presente jajaja no al menos mi parte consciente, me sigue frustrando no saber nada de esa noche, a veces me llegan imágenes pero nada concreto.

Rom. Jajaja es que esa suerte nada más las tienes tú…

Hablaron por más de dos horas mientras bebían vodka, juntos se quedaron dormidos acurrucados en el sofá, Betty recordó dos horas más tarde…

Be. Román!!! Mira la hora que es, llévame al apto o si no, ni podré levantarme mañana!!

Román aun aturdido de calzaba los zapatos, estaba muerto de sueño.

Armando iba llegando al apartamento, estaba destrozado, espero por más de hora y media cualquier explicación por parte de Betty, pero se sobre entendía que era lo que estaban haciendo a esas horas, Armando condujo muerto en lágrimas, en una ocasión casi choca con un camión por no fijarse en que el semáforo había cambiado de color, pensaba en su futuro con Betty y en cómo se le había ido de las manos, él debía pagar por todas las porquerías que había hecho el transcurso de su vida, y justamente eso hacía su Betty, se las estaba cobrando una a una.


Betty llego casi una hora después, hablar con Román la había tranquilizado, quería dormir de nuevo en los brazos de Armando pero al llegar al apartamento lo vio totalmente destrozado, habría vidrios por todos lados, tuvo que pisar con cuidado, fue al cuarto de Armando y no lo vio, sintió un frio en su pecho.


Be. Armandoo!? Mi amor donde estas??? Armando??? – nadie contestaba silencio total – Dios mío que paso aquí!? Armando dónde estás?? Mi amor… responde por Dios!!!

En la cocina un Armando borracho con una botella prácticamente vacía de whiskey intentaba levantarse, hablar, pero se ahogaba en su propio llanto, las lágrimas era lo único que brotaban de su cuerpo, como último intento tiro la botella contra la pared la cual se rompió en mil pedazos y logro llamar la atención de Betty, quien del susto brinco y soltó un pequeño aullido, al verlo corrió hacía él y se arrodillo a su lado.

Be. Mi amor!? Por Dios que te paso?! Que te hicieron??? Te golpearon? Estuviste tomando?, háblame amor por Dios… cálmate si? Quieres agua?


Armando solo alcanzo a asentir con la cabeza, aún seguía sin habla, estaba inconsolable. Betty lo ayudo a la ventar, el agua cayo en su garganta seca e irritada de tanto gritar sorbo a sorbo se fue calmando, hasta quedar en total silencio, tenía los ojos rojos por el llanto, al intentar hablar le vino el impulso del vómito y como pudo junto con ayuda de Betty corrió al baño de invitados en donde se le devolvió hasta el alma.

Betty lo ayudo a lavarse y lo llevo al cuarto donde lo recostó.


Be. Ya vengo, voy a prepararte algo de comer para que se te baje el alcohol.

Armando la tomo del brazo y negó con la cabeza, no quería que se fuera, necesitaba de ella, la guio y la acostó a su lado, la abrazo, su tufo era insoportable, Betty se levantó de la cama.

Be. Armando no voy a ningún lado si?, solo te prepare un consomé, necesitas bajarte la cruda que tienes, solo será un momento – le dio un beso en la frente – ya vuelvo.

Betty dejo todo listo en la cocina y volvió a la habitación donde Armando lagrimeaba en silencio.

Be. Ahora si me vas a decir que paso? – Armando la miro y volteo la cabeza al lado contrario de Betty, eso la molesto – No! Armando no me vas ignorar, me vas a decir ya que paso! No después, no al rato, ahora…! Así como tuviste el garbo para empinarte una botella entera de whiskey, me vas a explicar ya!! No sé qué rayos te hizo reaccionar así!

Ar. Tú… - al fin se animó a responder – Betty lo miro desconcertada.

Be. Yo!? Pero de qué hablas?... salí un momento, necesitaba pensar y encuentro esto, dime cuando te puse un revolver en la frente?

Armando miraba en dirección a Betty pero realmente no era ella quien tenía su atención si no la pared del fondo.

Be. Armando te pido que por favor me respondas, necesito saber que hizo que te hicieras tanto daño, por favor amor… - escucharla llamarlo así lo hizo volver a llorar, Armado parecía un niño – Armando por Dios, respóndeme, no sé qué tienes, me preocupas.

Ar. Tú ya decidiste… elegiste a Román. – Betty inclino la cabeza hacía atrás, miraba el techo, estaba cansada de explicar a Armando que Román es solo un amigo –

Be. En serio? – Betty volteo los ojos y miro el reloj, se levantó y fue a la cocina – Armando la seguía con la mirada aún inmóvil en la cama.


Betty llamo a Román desde la cocina, no le contó a verdad, le dijo que Armando tenía fiebre y que debía quedarse a cuidar de él, razón por la que no iría al día siguiente, Román la entendió y le dijo que no se preocupará, ambos amigos se despidieron muy afectuosos, Betty iba con el plato a darle de comer a Armando.


Be. Amor ayúdame sí? Pesas mucho y no te logro acomodar. – Armando se sostuvo y se sentó el mundo le daba vueltas, inclino un poco la cabeza hacía atrás buscando aliviar los martillazos que sentía, el olor del caldo le removió el impulso del vómito, lo rechazo – Bueno Armando te parece si mejor hablamos mañana, ahora mismo no puedes ni contigo mismo, duérmete, déjame me cambio quiero estar más cómoda.


Betty y Armando durmieron juntos esa noche, Armando estaba prácticamente encima de ella, no quería despegarse, quería tener asegurada a su lado, al principio le costó dormirse un poco, el mareo iba y venía pero después de un rato, se rindió.


Continuará…

 
 
 

Comments


  • Google+ Black Round
  • Facebook Black Round
  • Twitter Black Round

© 2023 por Blog de Crianza de Hijos. Creado con Wix.com

Av. Los Rosales 122, 28021, Madrid.

info@misitio.com

Tel: 914-123-456

Fax: 914-123-456

bottom of page